Fue una fiesta con todo
Campino, camiseta de Nápoli de Maradona, cantando para 50 fanáticos en Martínez
El par de conciertos del 2002 habían terminado de enamorar a los argentinos, y tras tantos años de esfuerzos, iba a dar su fruto: al año siguiente Die Toten Hosen llenaron el “Luna Park”, mítico estadio porteño (desde 1932 es el estadio cerrado privado mas grande de Sudamérica) con mas de 8000 fans. También por primera y única vez compartían el escenario con Los Violadores, la legendaria banda de Pil Trafa (seguramente el principal responsable de haber hecho conocidos a los Hosen en buena parte de los 80’s y 90’s en la Argentina). Como grupo apertura actuó Extremo 03. Durante el show de los Hosen, Pil se les unió para cantar juntos “Viva la revolution”. Todo ello aconteció el sábado 18 de octubre.
Entrada para el show del Luna Park
Andi: Naturalmente, Los Violadores son una banda especial en la Argentina, con un paralelismo histórico con nosotros. Surgimos más o menos al mismo tiempo, pero ellos estuvieron expuestos a circunstancias completamente diferentes a las nuestras. Se han creado cuando en la Argentina dominaba una forma completamente distinta de gobierno, y cuando fue muchísimo más duro existir como banda de punk rock. Por consiguiente, no actuaron junto a nosotros sin motivo alguno, había un trasfondo muy especial. Es una banda con una larga trayectoria y nos alegramos que aquella noche en el Luna Park pudiéramos estar juntos sobre el escenario.
La misma noche del Luna Park, termino en el club The Roxy donde en medio de un show sorpresa de Los Violadores, Campino y Breiti subieron a tocar con ellos.
Breiti se divierte mientras canta en casa de Juan Manuel
Breiti: Lo bueno del Roxy es que allí siempre hay un equipo e instrumentos. Para cualquiera que esté ahí y quiera tocar, siempre es posible. No hay que organizar nada, no se necesita tiempo para preparar, simplemente hay que ir al escenario y tocar. La última vez que fuimos, allí tocaba otra vez una banda cover de los Ramones. En el salón de al lado, a su vez el DJ también puso a los Ramones, mientras la banda aún tocaba. Si uno estaba parado en el medio, se escuchaba la misma canción, proveniente de distintos lugares. Eso es lo que siempre me gustó en el Roxy.
Ese mismo año, decidieron por primera vez trasladar a Argentina algo que ya hacia tiempo venían haciendo en Alemania. “Wohnzimmerkonzert”, literalmente “Concierto del Living”. Se organizo un concurso entre un canal de TV y una radio del cual surgieron 4 finalistas. El premio era que los Hosen tocaran en el living de la casa de un fan, entre las 4 opciones el staff de DTH que vino desde Alemania a elegir el ganador, eligió una vieja casona en propiedad horizontal sobre la calle Córdoba en la localidad de Martínez, en el conurbano norte de la Provincia de Buenos Aires. Una casa deshabitada era el ambiente ideal en cuanto a prestaciones y distancia contra una gran casona del barrio de Villa Devoto y dos casas alejadas, en Escobar y San Andrés de Giles. El ganador se llamaba Juan Manuel Marcos. La consigna era enviar cartas donde se dijera la razón por la cual uno consideraba que podía ser el ganador acompañado de una foto de la casa.
Vom en casa de Juan Manuel, de fondo el combustible y la medianera que separaba a la casa de adelante
Vom: Él había ganado porque había dicho que su perro estaba enfermo. En su carta escribió que el perro bailaba y se veía mucho mejor cuando Juan Manuel le ponía canciones de los Hosen, para después acostarse en su canasto y mostrarse realmente muy enfermo. Cuando íbamos a Argentina, en la parada en el aeropuerto de Frankfurt, recibimos una llamada diciendo “el perro está muerto”. Hicimos miles de kilómetros para tocar para un perro muerto. Fue la primera vez que toqué para un perro muerto. Pero la verdad que fue una muy buena noche.
Este show antecedió en 2 días al del Luna Park. Para Juan Manuel y su medio centenar de amigos invitados fue una velada que se extendió hasta bien entrada la noche, donde tanto el dueño de casa como la banda la disfrutaron a pleno.
Campino y Breiti en la terraza de la casa de Juan Manuel Marcos después del Show del Living Room
Andi: En Alemania nos gusta hacer estos conciertos. Encontramos muy atractivo tocar una vez en un living en Argentina. Encima, le tocó a uno que es un real fan hardcore de los Hosen, y además flor de tipo. Es una lotería saber dónde uno aterriza cuando el concierto es adjudicado en un sorteo. Cuando llegamos, había vaciado todo el living y en la vitrina del aparador había, uno al lado del otro, como sus objetos más importantes, una foto de Maradona y una copia en vinilo de nuestro disco “Ein kleines bisschen Horrorschau“. Y esto tiene un significado muy especial: Juan Manuel es fanático de River. Colocar a Maradona, un ex jugador de Boca en la vitrina, expresaba todo: en Argentina sencillamente es un héroe para casi todos. Estar al lado de él en la vitrina fue un verdadero honor. Sabemos apreciar este gesto. Estos conciertos tienen su propia dinámica, también porque asiste mucha menos gente. Fue una fiesta con todo. Por cierto, no me puedo acordar como terminó.
Esta trepada de Campino al techo del escenario en el Quilmes fue narrada hasta por los pasajeros del tren que pasaba justo en ese momento a metros del Estadio de River
Vom: Estaba seguro que nos iban a meter presos y arrojar en una prisión argentina para no ser vistos nunca más, porque era una casa en un vecindario lleno de casas... Teníamos a Manfred Meyer, nuestro jefe de seguridad, parado afuera con plata en los bolsillos para darle a la policía en el peor de los casos (risas). Pero la policía nunca vino, lo que realmente fue increíble, porque había mucha gente en la casa. Y con la cantidad de equipo que había, el volumen era súper fuerte. Realmente fue muy divertido, un show brillante.
Como corolario del, sin dudas, año mas importante para sus fans argentinos, el Viernes 23 cerraron como cabeza de cartel después de Attaque 77 el mega-festival “Quilmes Rock”. Había llovido torrencialmente durante todo el día, pero cuando aparecieron los Hosen sobre el escenario la lluvia paró de repente y casi mágicamente las nubes se despejaron.
En vivo en el Quilmes
Andi: No me puedo acordar del clima, pero fue un festival gigante. Justo antes que nosotros tocó Attaque 77 y eso ya fue grandioso, ver este show, porque tienen una comunidad muy grande de fanáticos. Fue copado poder vivir esto alguna vez en vivo, en la Argentina. Para nosotros fue, exceptuando el concierto de despedida de los Ramones, el primer gran festival en el cual tocamos en la Argentina. Eso siempre produce una cierta inseguridad previa, por saber si funcionará. Cuando se toca un concierto propio, se sabe que la gente va a verlo a uno. En un festival, no se puede estar tan seguro; esta es otra clase de prueba. Por suerte, las preocupaciones no tenían fundamento. La gente nos apreció y también nos lo demostró. Este fue para nosotros un paso muy importante.
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La gente realmente lo amo